DIGUEM NO.
De lo mal que se ve el panorama socio político me obligó a crear el blog"Velino al día"aquí en la red de redes,para arrojar luz allí donde solo priman las sombras y las tinieblas.
Cuando hubo que dar la cara hay estábamos hace medio siglo, guitarra en mano para decirle a un pueblo que también podíamos decir !no! el lo hacía en catalán: "Diguem no".
Antes de que la oscuridad fuera total, obligada por el régimen me arrojo la luz a la ciudad homónima para aprender a cantar de los maestros Braseens, Jacques Brel, Leo Ferré...porque aquí-como sucede ahora mismo- entre tinieblas las canciones eran monólogos y había donde aprender a falta de luz y magia.
De allí de la "ciudad de la luz" donde compartí con los monstruos del verso como Julio Cortázar traje lo mejor de este oficio malevaje incomprendido de donde catamos sabiduría de todos los de esta caterva sin fin:los cantautores.
Un día nos encontramos para hablar de estas y otras cosas tras más de medio siglo de cantar a un pueblo que no despega, más bien al contrario; retrocede.
En suma los catalanes que fundaron una especie de truoppé que llamaron "El jezge judges" o algo así mientras aquí seguíamos entre tinieblas y olvido que me obligó de nuevo a viajar,siwmpre hacia la luz. Mientras aquel elenco heterónimo abría fuego y dijeron !no! como ahora mismo dicen miles de españoles están en ese adverbio maldito obligado por las circunstancias y el "Régimen" que perdura.
Más ese régimen instaurado a golpes sigue vigente como si hubiera venido para quedarse para siempre y no irse ya de nuestras vidas.
Y tanto que hasta la izquierda irredenta lo perdura. Quedan las canciones marquetizadas apoyadas por lo medios que siempre seguirán al abanderado a lo que voceen esos regímenes malditos, pero latentes.
Sin abandonar del todo el escenario muiscal, Lluis Llach, un día se fue al parlamento para dejar aún más claro que hay un país que dice !no! porque quiere tener bandera propia.
Eso cuando los compañeros- colegas- catalanes gozaban de las ayudas del capital endógeno para publicitar sus cantos. Catalanes que también eran valencianos y de otros,lugares como ahora mismo yo hago como para adelantarme a la esfonia cultural patria que nos persigue.
Sigo aquí en mi tierra, entre tinieblas, en este lugar maldito que es la cola de la cola de un país, de un continente que es la cola global, esa Europa insolidaria que va a a lo suyo, muestra el Crexit impuesto por los anglosajones conquistadores de siempre. Hasta puede que nos recompensen con un peñón.
Hombres enteros son estos que dieron economía,extrayendo el negro carbón de las entrañas de la tierra, cuando esta región era primera en el ranking económico de España.
Y ese eslogan de Raimón- Diguem no- persigue ahora a un partido que lleva más de un siglo de historia a sus espaldas.Aquel que era la empresa de una Asturias que florecía a golpes de carbón por bandera y una rosa y un puño como emblema, el de los mineros bravíos que hoy ven pasar otro carbón que no es suyo por delante de sus casas desde los barcos hasta las centrales térmicas porque el suyo es menospreciado.
El sigue vigilante cuando otros muchos "Diguem no" Su mensaje perdura en un pueblo que reconoce a un partido que lo dio todo lo suyo por este país.
Hoy pasado el tiempo de oprobio aun quedan muchos otros que ya con la rosa ajada dicen !no! como aquel cantautor que se perdió en el recuerdo que no el olvido.Vuelvo estos días del barro al aasfalto, allí donde se fermentó mi existencia, para cantar en el barrio y llevar el mensaje a un pueblo adormecido que no expira por mucho que "diguem no".
NOCHES DE NEGRO CARBÓN.
Alguien ha inventado unas "noches blancas" cuando la noche es negra como el carbón que ya no pican los bravos mineros porque -eso dicen-no tiene salida para abastecer las térmicas que producen la energía patria, asturiana.La que otrora fuera fuente de ingresos segura para una región devastada por el poder central.
Entonces "el" tenía mucho poder, hoy es pasto de una prensa ansida de darle caza cuando tantos y tanto le deben en esta tierra más pobre y olvidada.
Quizás por eso se publica la enésima entrevista a los lideres sindicales para ¿que sino? preguntarles por el plantígrado sindicalista- José Ángel Fernandez Villa- que reposa cual guerrero desarmado por su propia felonía en un piso de la ciudad.En su cueva personal ni les atiende. Más ¿que importa? ellos publicarán lo que les venga en gana. Son eso que se ha venido en llamarse "el cuarto poder" y bien que se usa ese privilegio.
Hay quien dice que la noche terminó,más ahí quedan los rescoldos de un tiempo mejor,el de ese pueblo sojuzgado que quiere volver al esplendor perdido.
"Noches blancas" teñidas de negro carbón en un territorio minero- al menos hasta hace poco-del que apenas queda una vela blanca para entretener al personal, pero teñida de negro. En una de eaas noches de barrio dejaré de nuevo mi sonar con un "Diguem no" por bandera.
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