¿CULPABLES?

¿ CULPABLES?

Me hubiera gustado estar junto a Ti, acompañando en esas horas a esos magos y sabios para ofrecerte mi comentario sobre algo que dio sentido a nuestras vidas.

En estos días donde la Navidad, todo lo envuelve, no está de más recordar el misterio de la Anunciación y Nacimiento de quien los cristianos llamaron el Salvador. Cuando desoyendo sus advertencias y consejos, de un lado al otro del mundo se suceden acontecimientos que demuestran lo contrario. Guerras hambre y desolación hacen que aparezcan en lontananza esos cuatro jinetes que creíamos desterrados de nuestras vidas, tras los acontecimientos vividos en estos 2000 años de los que tan pocas enseñanzas hemos extraído.

Parece que todo aconteció el primer día de la era cristiana, que no fue tal, cuando un grupo de sabios-no eran solo tres- siguieron la estela que marcaba la conjunción de los astros- Júpiter y Saturno- hacia un mísero portal de la ciudad hebrea de Belén para contemplar en directo el alumbramiento del nuevo Rey de los Judíos. Lo que en realidad sucedía era la explosión y creación de una SUPERNOVA.

Una vez llegados allí guiados por esa estrella,los magos sabios-más de los que se dice- se postraron ante el Redentor para ofrecerle oro, incienso y mirra, tres valores muy preciados en aquellos años de incertidumbre religiosa de Judea, un país  dominado por el imperio Roma y dbajo el poder del Rey hebreo Herodes; claro. Y después de ahí comenzamos la cuesta arriba o atrás en el tiempo y el espacio.

Algo así sucedió -una Supernova- aquel día, cuando en un portal de Belén nacía el Salvador.

¿Culpables? Parece que los astros que cada miles de años se conjugan en esa terminal interestelar y dan sorpresas agradables como esta del nacimiento del nuevo Rey de los Judíos, un acontecimiento que seguían los designios de los sabios astrólogos y astrónomos que cruzaron los desiertos del Asia menor hasta llegar a esa cueva donde habitaba una familia de carpinteros, un asno y mucha ilusión por ver nacer al niño que anunció el Dios de dioses. Allí donde ese levanta ese pesebre desde siglos atrás, árabes y cristianos y judíos siguen peleándose desde hace dos mil años por esos lugares donde acuden miles de creyentes cristianos durante siglos.

Así comenzó la adoración al patrón dólar, el Vellocino de Oro de nuestras vidas y ya nada fue igualdsede que se fundaraa Wal Estret.

¿Culpables? Estos días todos, porque no creemos ya en sortilegios más allá de los que impone el nuevo Imperio que marca el parquet donde reina el dólar y los servicios secretos, la CIA y otras agencias políticas que marcan al celuloide el rumbo de nuestras vidas. En nuestro consciente ya no creemos en milagros, porque, sencillamente: no existen, o no los vemos reflejados en el día a día cotidiano,, más allá de las creencias de cada cual.

Últimamente al menos Dios no nos vista regularmente que se sepa y los niños inocentes aquellos que quería segar sus vidas el rey Herodes quien también era judío se aferran a la vida y al kalasnikov cuando no se circundan las cinturitas de sus tiernos cuerpecitos con metralla para ser arrojada al infiel cristiano. Esos cuerpos inocentes que se inmolan en nombre de Cristo, de Buda, de Mahoma en pronunciamientos impuestos por sus mayores. ¿Culpables? No: inocentes.

Niños, víctimas de la guerra el genocidio inútil propiciado por quienes desoyen los consejos del Mesias, quien dejó escrito su sufrimiento y muerte clavado en una cruz.

Porque a lo que parece y anuncian los sabios de ahora también son astrólogos y astrónomos, hubo otra vida antes de Cristo y solo esos sabios visionarios hicieron que se seguir la estela marcada por un de un acontecimiento trascendental, espectacular, cuando los astros de nuestra galaxia entraron en conjunción y se produjo el Big Band que condicionaría nuestra existencia. Aquella estrella que condujo a los sabios de la antigüedad hasta un pesebre de las afueras de Jerusalem !oh Jerusalem, Jerusalem! Dijo el niño redentor antes de que expulsara del templo a los mercaderes que siguen otra estela fenicia hasta nuestros días.

La muestra y el enunciado iconográfico es elocuente:  "Fuera de este lugar sagrado ,nuestra casa"

La poetisa de los niños, Gloria Fuertes, lo veía como “un mundo al revés” Mi alter ego, Paco Ibáñez, le puso música llevando al pentagrama los versos emocionados a la autora de los poemas para niños. Porque eso es la vida: la poesía, los niños… y poco más. Y son muchos los que se enganchan a la métrica para justificar unas vidas plenas de experiencias.

El periodista la busca recostada en estos riscos,al sol de los primeros rayos del invierno. Parece mostrarse remisa, pero volverá al corazón del poeta.

Lo hace Chano García que es como buen poeta y contador de cosas - Cristo “utilizó” a los profetas para contar sus andanzas- cree en una “sirenina” que surgió de entre las aguas de un naufragio acontecido una noche de invierno frente a las costas asturianas de Tapia de Casariego, cuando una embarcación de navegantes ingleses zozobró frente a esos riscos, en ese puerto del norte, ese lugar mítico donde otro poeta llamado Antonio Machado, situó a unos de sus apócrifos. El mismo vate que quería ver a Cristo sobre las aguas del Tiberiades y no en un madero, en la cruz romana.

 

Discepolin nos dejo escrito el "Cambaleche" que es la vida y Carlitos puso su voz de oro a la canción.

Otro poeta y músico cantor de orígenes lunfardos, llamado Enrique Santos Discépolo era más pesimista sobre nuestro destino inminente cuando escribió el “Cambaleche” tan presente ya en nuestras vidas. Ese texto premonitorio que dice que los “chorros”-ladrones- y demás ralea campean desde el 506 al 2000, vendiéndonos cual chamarileros de feria, historias y mentiras en triles sacando nuestros denarios hasta unos lugares que se conocen por paraísos fiscales. Cristo esto no lo permitiría. Mas aun: sacaría el látigo flagelo para golpear a estos mercaderes que siguen utilizando los templos para darse golpes de pecho cuando les quitan el pan a sus hermanos.

Esos pobres y legañosos que piden a las puertas de esos lugares santos donde esta omnipresente ese Dios hecho carne que habita entre nosotros y al que tan poco vemos. Eso ve el sumo pontífice el porteño Francisco, cuando les admoniza y sacude para que se postren ante el Altísimo para rendir cuentas y que reconozcan sus pederastias el pecado de la carne.

Ella,la poetisa Gloria Fuertes veía "un mundo al revés" Paco solo le puso voz y sentido asu palabras.

Lo dicho: “un mundo al través” que preconizaba la poetisa donde adora de postran ante el otro “vellocino de oro” ese asno travestido en oro de la suerte, esa que no pronostican ni astrólogos ni astronómos. Pero hayla. Nos llega a cuentagotas cuando la fortuna reside en las cajas fuertes de los bancos que pertenecen a una antigua

“casta” de mercaderes de sueños que viene de antiguo. Esos billetes manchados de sangre inocente que se llevan hacia lugares seguros y de la que luego, ya tarde, conocemos su procedencia. Pero la vida sigue y ellos tambien continúan siguen chupando nuestra sangre hasta curiosamente los pocos que ingresan en prisión. Porque – va de poesía- otro vate ya decía que “Don dinero” era y es un “poderoso caballero” en esa metáfora ominosa que preside nuestros actos, esas vidas sojuzgadas.

Hasta que llegaron otros “jinetes templarios” que al grito de “si podemos” tratan de darle vuelta a esta tortilla que en el horno se nos quema, que diría el poeta César Vallejo.

En nuestros días se juega con otros vaticinios no menos poderosos por medio de los neo gurús que anuncian por medio de encuestas ganadores a las puertas de los templos y canonjías. Las predicciones de los nuevos “piscator” que como el de Salamanca llamado Torres y Villarroel hacían pronósticos y se ganaban reprimendas y defenestraciones.

¿Culpables? Todos. Aún contando con esos datos generosos que atribuyen a estos jinetes del cielo un triunfo arrollador. Más que no cunda el pánico: Esos mismos gurús idearán algún “Cambalache” para que eso no ocurra así. Al tiempo que se hace, como dijo el tanguero Discepolín desde el 506 al 2000 y va para largo. 

Ellos dicen "si podemos" y ¿como negarles ese derecho? de darle vuelta a la Historia donde siempre perdemos los mismos.

Los Mediaset de nuestras vidas obrarán el milagro, el resto, en esa técnica de hinchar el globo, “el cochino para que engorde” y luego prenderle fuego. Ellos lo saben desde que el mundo es mundo y aún antes del nacimiento del Salvador.

Ahora que el símbolo de la “coleta” impone la moda como en aquel territorio de Cúchares que avisaba del rapado cuando decidían dejar el ruedo. Estos jóvenes del mundo al revés, dejan crecer como signo de de rebeldía e identificación parecido a las cruces que se interponían al sacrifico de inocentes en época de Herodes. Y así van directamente hacia La Moncloa que es el lugar que ocupan esos que han venido en denominar “la casta” y que esperan desaparezcan del mapa de nuestras vidas.

Más, inexorablemente, todos deben acudir más tarde o temprano ante el juez de jueces después de pasar el filtro de los humanos. Reyes príncipes y princesas y consortes caballeros templarios del dinero y políticos y chamarileros. Todos en un mismo saco.

Un niño adulto al que seguí sus pasos desde siempre.En esta ocasión  nos dejó un mensaje sereno, pero resuelto a que las cosas cambien para el bien de todos.

Redacto estas líneas cuando en un mensaje corto y conciso el Rey que se dice “de de todos los españoles” -tal es su magisterio- se dirige a sus administrados, por medio de ese invento ominoso y catódico llamado televisión que tan poco efecto-no existía- hizo a los primeros cristianos antes de que Pedro, quien por cierto negó tres veces al Maestro, fundara la Iglesia católica en la infiel y pagana Roma.

"Pedro-piedra- pescador de  hombres, sobre estas piedras levantarás mi Iglesia". Y allí sigue viendo pasar el tiempo.

Aquella explosión internuclear dio de comer a mucho “soperón” desde hace más de dos mil años que poco representan en nuestras vidas antes de que se produjera la explosión de los astros en el mundo precristiano y que trajo un nuevo rey y una nueva vida a la que llamáramos “Era cristiana” Eso y no otra cosa fue el presagio hecho estrella que guió a aquellos magos de oriente que acudieron a un portal destartalado donde una familia de pobres alumbraban un nuevo mundo, postrándose y mostrando sus respetos ante el Rey de los judíos. Ellos por medio de las estrellas y adivinanzas fueron guiados hasta allí y así supieron de su nacimiento y lo adoraron sin tiempo posible, en una establo donde sus padres fueron elegidos por el ángel anunciador.

Así dio muestras en el postrer sacrificio de su entrega  por los hombres y al Padre.¿Porque me abandonas? le dijo al espirar y nosotros empeñados en no seguir sus enseñanzas.

¿Culpables? Parece que todos que no seguimos sus enseñanzas y El que ya no esta- físicamente-entre nosotros para blandir el látigo ante tanto mercader de ilusiones. Siembra los campos y arenas del desierto de jóvenes cadáveres cuando lejos de ir hacia el futuro, proyectamos en pasado antes del big band en nuestras vidas nuestras frustraciones. 

Paco, a su manera, dejó escritas en el aire,el verso, consignas de una vida entregada por la que merece la pena luchar.
Oigo ahora, en esta mañana de la Navidad, la voz aguardentosa de Paco Ibáñez entonando los versos emocionados, para niños, de Gloria Fuertes, donde se advierte ese “lobito bueno que no se comía los corderos”. Más que un propósito de la buena mujer y poetisa quería, porque a la vuelta del CD aparece como siempre ese “poderoso cabalero que es Don Dinero”.