"esas noches que nos marca el destino"
Sencillamente una mujer hermosa a la que vemos pasar y no pasa desapercibida porque lleva el encanto de la musa que facilita la inspiración, las canciones.
Sucedió una tarde cualquiera de esas de fin de año que nos marca el destino en el calendario, cuando vemos las películas en B/N y nos esperan en algún lugar para festejar la entrada del nuevo año. En un bar de estos de penúltima copa,esos que pintan en las películas de Nueva York, me encontré con Elena y su familia, una mujer sensible y culta, que a veces trueca la ropa de mercado para vestirse de hurí y nos deja un sonrisa una palabra al tiempo.
No le anda a la zaga su hija Beatriz, ambas dos bellezas escondidas tras el tul, pero asequibles a este periodista sensible a sus encantos quien posa con ellas y con el dueño del local donde las conocí una día de "NocheVieja".
Aquel día que se hacía noche vieja no seguimos más allá de una dirección que el tiempo olvida en la mesilla de la red, más no la hora que genera ese encuentro fortuito. Elena se fue con su hija y la noche y su compañero y yo también porque ese día de compromisos poco más se puede hacer que facilitar un correo.
Aquí dejo la constancia de un momento hermoso, de una noche prodiga en confidencias,puede que fallida porque las circunstancias, el destino, obligan
Hermosa mujer la que a veces esconde su belleza tras un velo su belleza natural. Le debía una y por esos azares de la red la he encontrado. Un beso Elena que recuerdo con deleite aquella noche con la delectación propia que las mujeres como tu imprimen,donde dejáis huela en los corazones sensibles de los varones, sensibles. ya nos veremos y entonaremos uno de esos cantos en los que se reflejan las noches y los dias de un tiempo de amistad y cariño. Salud
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