lunes, 16 de diciembre de 2013

D Nanterré a las barricadas. Aquel Paris del 68

Aquel año de revolución callejera en mi recuerdo.Paris del 68

Aquella primavera dorada no lo era tanto cuando cruzé por primera vez la frontera de Hendaya camino de Alemania. Cientos de kilómetros para reencontrame con mi hermana en Colonia,para disfrutar de los carnavales de esa ciudad y conocer su casa, la de los suyos.Alli vive aún alli compartido con Oviedo.
DE Hendaya a Bruselas donde me esperaban los míos. Cruzamos la frontera por Aachen, camino de la ciudad del Rhin. Queria empaparme de una nueva cultura ya en democracia."Sie ist Deuchsland herr". Era la primera vez que alguin se dirigía a mi en un idioma que medio chapurreraba.
                              Dolors quiere cantar alli. Anda que no le queda

Ya en su casa me presentaron algunos vecinos y familiares. Uno de nombre Herr Voochen,fue mi primer amigo aleman. Trabajaba de corrector en el Frankfurter Algemaine, un periódico serio que alli en la cuenca del Rhur era de los mas leidos. Voosen era un hombre de izquierdas que alli en Alemania representa mucho esta ideoloía. Por decir un ejemplo:El PC aún estaba prohibido en la clandestinidad.
El me habó pro ver primera de la Bader Mein Hot" los landestino 
En la kela- sotano- de su casa asistí a una reunión clandestina de alemanes de un lado y otro del pais, venian detrás del telón de acero. DE la DDR y sus "hermanos" de la Alemania del Oeste. 
Nos filmaron y !sabe Dios! adonde estarán ahora aquellas imagenes. Fue una tarde bajo el entarimado de su casa, hablando de todo ¿y de España? dije. !ah Spànien! y rieron.
Un dia en la piscina local, Vooseen me dijo en un español de aquella manera:"Se prepara una buena en Francia. París esta que arde". Quise saber más sobre el asunto y me dijo: "los trabajadoers y los estudiantes, van a tomar la Bastilla-!al fin!- los estamentos públicos, la Universidad y la televisión,el Gobierno acerá y la Republica: o la la
!coño! exclamé: alli tengo que estar yo. Y sin más preámbulos hice la maleta y me presenté enParis. Eso sucedía ya pasados los carnales cuando arribe a la estacion de Estrasburgo. "Pardón mesié pasaport" me dijo aquel gendame de bigotillo recortado,eso apenas puse los pies en el andén. "Bien ¿estudiant espagnol?. No dije músico. "Alé alé" "y ...nada más.
Me instalé cerca del Barrio Latino donde see cocía la cosa.Alli conocí a un argentino:"Che: se está armando una!.Y la que se armó, alli en  la Universidad en Nanterré, los chavales se encaramaban a las rejas del patio y comenzaron a llover piedras de canto-cantosrodados- por doqueir.Y "debajo d ela spiedras se oía el mar" consignas así que salían de los labios de aquellos chavales sin peinar.
!ay! si Manolin estuviera allí con "le flicks"

Empezaba asi la revolución, donde los crochard-pobres- se unían al grito unánime de !vivre la revolution! y ya me metí en el fragor de la batalla donde"le flicks"-policía antidistrubios se empelaba a fondo contra los insurgentes quines volcaban e incendiaban todo lo que tenían por delante. Era: !la guerra! que un mandoble me tocó a mi en un brazo permaneciendo entumecido varios dias.
Pero había que ir al mogollolón  y lo hicimos. A los talleres donde los trabajadores de Citröen/ Peugot pedían lo imposible. Y salió aquella voz germánica de entre los soterrados del metro de Orly. 
Se llamaba Cohn Bendit y le miré con aquellos rizos y el pelo largo. Ya nunca más le vi.Lo veo ahora por la tele, casi medio siglo después en el Parlamento Europeo donde es diputado.
Aquella fue una experiencia que marcaría toda mi vida posterior, cuando en España ni se podía imaginar nadie aquello. Llamas y lanzallamas, tanquetas y gritos en las calles y heridos, más no tantos como lo que sucedía en las fábricas donde los trabajadoers querían una revolucion: en firme. De Gaulle calmó los animos y su voz aparecía cada dos horas en el Tf1- Televisión estatal- para calmar. Pero duró un tiempo que a mi me parecía; corto.
                               Y de allí hasta este lugar que ocupo a diario en mis Velininas

De regreso a Madrid en un avión de la Sabena belga fui detenido y fichado por "rojo" y así pasé dos noches en los calabozos de la Puerta del Sol de Madrid y más tarde  en Salesas donde un joven magistrado me dijo:"¿de donde es usted?" De Asturias dije. "Pues no se olvide que esto no es Paris-aún-pero enseguida cambiarán las cosas". Vayase a su casa.
Y me vine para tallarme para el servicio militar que hice al año siguiente en el Ferral del Bernesga- Leon- y el cuartel de El Milan de Oviedo,donde hoy estos jóvenes, como yo lo fui, puede que ignoren lo que pasó en aquel Mayo del 68 parisino.Algo que pudo cambiar el mundo,pero no fue así.
Por eso siempre recurren quienes me conocen: "Velino: siempre nos quedará Paris" Si pero sin Casablanca.Añado      

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